El dolor y la incertidumbre se apoderan de una madre que, hasta el día de hoy, no sabe qué ocurrió con su hijo, Facundo Maita, quien fue hallado sin vida con una herida de arma de fuego dentro de la Escuela de Suboficiales de la Policía de Salta.
En diálogo Con Con Criterio Salta, la mujer expresó que la causa no ha avanzado desde el primer día y aseguró que ningún responsable fue apartado de su cargo. Además, apuntó directamente contra la institución, a la que responsabiliza por lo sucedido.
“Facundo soñaba con ser policía, se preparó mucho para lograrlo. Tenía un excelente promedio y sus compañeros lo querían mucho”, relató la madre, mientras recordaba con orgullo los esfuerzos de su hijo.
Con lágrimas en los ojos, narró lo ocurrido el día de su muerte: “Según la autopsia, su fallecimiento fue a las 5 de la tarde. Pero yo me enteré recién a las 11 de la noche, y solo porque llamé a la escuela. Me dijeron: ‘No puedo darle más información, una psicóloga irá a verla’. Fue entonces cuando me confirmaron que el joven del que hablaban las noticias era mi hijo, que no había regresado a casa”.
La madre explicó que aún no ha podido iniciar su duelo, ya que la investigación sigue estancada. “No sé de qué murió ni qué ocurrió en ese lugar. No me permitieron verlo ni prepararlo para el velorio. Me lo entregaron al día siguiente, sin explicaciones. No pude abrazarlo ni besarlo por última vez”.
Con profundo dolor, agregó: “Ese día salió de casa contento, con una sonrisa. Y me lo devolvieron sin vida, dentro de un cajón. Fue un golpe devastador. Necesitamos saber qué pasó”.
Facundo Maita estaba a punto de graduarse como suboficial. Esta semana, su camada celebró la ceremonia de egreso, pero desde la escuela no invitaron a su familia, un gesto que consideran que debería haberse realizado como una forma de consuelo.