a vida de Bautista Candia cambió de un día para el otro. “Mi hijo tiene 10 años, siempre fue un niño normal, nunca se enfermó ni estuvo internado. De repente, le agarró una enfermedad que apareció en minutos”, comenzó relatando su madre, Brenda Torres.
El 11 de junio, Bautista se levantó con dolores de espalda. Su madre pensó que se trataba de un simple calambre y comenzó a hacerle masajes, pero en pocos minutos, Bautista dejó de sentir los brazos, las piernas y se desplomó en el piso.
Desde ese día, la madre de Bautista ha vivido un calvario por el abandono de la obra social. “Boreal no se hace cargo de los gastos, estoy aquí para luchar por lo que le corresponde a mi hijo”, mencionó con firmeza a Con Criterio Salta.
“Mi hijo contrajo una bacteria en el hospital, necesita estar en una clínica, necesita el traslado urgente. Su vida corre peligro. Voy a pasar la noche aquí si es necesario”, finalizó.