El caso de Ale Hnos. es uno de los más contundentes, pero no es el único que refleja el desastre que es parte del transporte público de pasajeros en el interior de la provincia. En las últimas horas, el chofer de Tartagal dejó en evidencia el deterioro de las unidades y se convirtió en una especie de héroe al negarse a conducir un colectivo totalmente dañado.
El trabajador es parte del plantel de la empresa “13 de Junio” y, según dicen, es uno de los que más brega por las irregularidades. Con la presencia de un medio local y la Policía, expuso los daños que tiene la unídad que le dieron para circular.
“Sacar ese ómnibus a la calle es un peligro para el chofer, para los pasajeros y para cualquiera que se nos cruce en la calle. Yo no pienso conducirlo”, remarcó en una transmisión en vivo del medio La Cruda NN.
Según denunció el chofer, la firma tiene unidades más nuevas, pero se las guardan “por cuestión de ahorro”. “Hay otras unidades que están en buenas condiciones para prestar el servicio, pero no la quieren sacar porque gasta más gasoil”, resaltó.