En medio de las noticias duras de cada día, surgen historias que invitan a los salteños a mostrar su buen corazón. Este es el caso de Daniel, quien recorre la ciudad vendiendo sándwiches para salvar a su pareja, quien se encuentra en la etapa final de un cáncer.
Su vida no ha sido fácil. Actualmente está sin trabajo, sus hijos viven en distintas casas y su esposa permanece internada. Acompañarla en este proceso ha significado noches en la guardia del hospital y en plazas, diciéndole a ella que volvía a casa para no gastar en colectivo.
Con algo de dinero que le prestaron amigos, decidió preparar sándwiches de pollo, que vende en el centro a $3000 cada uno, buscando así un sustento.
Los salteños pueden ayudar de distintas maneras: comprando sus sándwiches o colaborando con una donación que le permita sobrellevar esta difícil situación. Quienes deseen aportar pueden hacerlo a través del alias daniel.480.giro.mp.
Entre lágrimas, Daniel se encomienda a la fe y sostiene: “Yo creo en los milagros, creo que Dios podrá hacer algo”.