El presidente Alberto Fernández celebró este jueves los 1000 días de su gestión y aseguró que “tocaron muchas adversidades” pero que, sin embargo, el Gobierno se hizo fuerte y él no faltó a su palabra.
“Como lo dije el primer día, tenemos una primera obligación: la primera obligación es con los que están más abajo”, recordó la alocución de uno de sus actos de Gobierno y añadió: “Nosotros nunca bajamos los brazos y nos importa mucho nuestro pueblo”.
“Los convoco a construir un mañana, a estar seguros que un mañana es posible, a estar convencido que puede haber un Estado presente que los ayude”, finalizó.