La muerte del joven aspirante de 22 años, F. M. M, quien cursaba su segundo año de formación en la Escuela de Suboficiales de la Policía de Salta, es motivo de gran dolor en las filas policiales, pero también de mucha expectativa, ya que no están de todas claras las circunstancias de su deceso.
La muerte del joven aspirante, quien residía en barrio Castañares, se registró el domingo pasado. En la denuncia que da cuenta del hecho, radicada en la Subcomisaría de Villa El Sol, el oficial que intervino reveló que ese día cumplía tareas como jefe de turno, de 14 a 22 horas.
Dijo que, al momento en que realizar un control en dicha dependencia policial, es que tomó conocimiento de vía radial del hallazgo de una persona con herida de arma de fuego dentro del establecimiento educativo de la policía, ubicado en villa María Esther.
Indicó que, ante semejante novedad, se trasladó de inmediato a la escuela con el oficial de servicio. A las 20.10, llegaron al edificio, donde se entrevistó con la directora de la escuela, la comisarío inspector, Carola Salas Santander, la que informó la identidad del aspirante.
Explicó que el estudiante fue hallado a las 19:50 por otro aspirante de primer año, en la sala de armas. Dijo que lo encontró tendido en el suelo y que emanaba sangre de su cabeza, por lo que, de inmediato, dio aviso al oficial de servicio, el que, a su vez, constató que el hecho.
Al revisar el cuerpo, estableció que presentaba una herida y que, aparentemente, se habría efectuado un disparo con arma de fuego en la boca, por lo que se solicitó asistencia sanitaria de inmediato y alertó a la superioridad, haciéndose presente una ambulancia.
Se trataba del interno 1031, del SAMEC, a cargo del enfermero Flavio López, quien verificó el deceso del aspirante, por lo que requirió la intervención del médico legal de policía. Por otra parte, se estableció que el estudiante, ese mismo día, se presentó en este establecimiento de forma voluntaria, alrededor de las 19.
Misterio
A su llegada, el oficial de servicio le impartió directiva de realizar fajina (limpieza) en sala de armas, sin saber más nada del aspirante, quien se dirigió al lugar donde había sido comisionado, sin notar nada extraño en su conducta más allá, de que se presentó de manera voluntaria.
Una vez descubierto el cadáver, se demarco un perímetro a fin de resguardar el lugar del hecho. El cuerpo, según lo denunciado, estaba en posición cúbito dorsal, con manchas sanguinolentas a su alrededor y a sus pies un arma de fuego pistola de 9×19 mm., marca HI POWER, con corredera abierta.
Con este escenario, se puso contactó al fiscal penal, Leandro Joaquín Flores, quien dispuso, entre otras diligencias, el resguardo de la escena del hecho; se realice coordinación con el del CIF a fines de que se haga presente Criminalística y Médico del CIF; la intervención de la División Homicidios; la declaración del oficial y el aspirante que encontró el cuerpo. Por último, ordenó que la familia del aspirante sea notificada del fatal desenlace.
En los minutos subsiguientes, varios móviles comenzaron a llegar al edificio de la escuela policial, tanto de la misma fuerza como del CIF. Incluso se hizo presente el mismo fiscal, quien pasó a supervisar las diligencias en el lugar de hallazgo del cadáver.
En una de estas medidas, en tanto, surgió un suceso misterioso, pues al revisar el relevamiento del lugar, se identificaron varias armas de fuego, entre ellas la que fue utilizada presuntamente por el aspirante. La misma tenía cuatro vainas servidas, entre ellas la utilizada.
Lo que despertó interrogantes fue cómo llegaron proyectiles al arma utilizada por el aspirante, a lo que surgió la hipótesis de que el joven las habría llevado. Pero, por sobretodo, llamó la atención un manuscrito que decía lo siguiente: “PERDON REVISEN MI CELULAR”. Lo más enigmático fue que buscaron por todos lados el teléfono del joven y no fue hallado.
Ayer, el fiscal penal anunció que investiga las circunstancias en que se produjo la muerte. Confirmó que fue a causa de una herida de arma de fuego y según los primeros indicios, se habría tratado de una conducta autolesiva. No obstante, dijo que se encuentran en cumplimiento numerosas medidas, tales como relevamiento de testigos, análisis de los indicios recogidos y otras, tendientes a lograr esclarecer lo sucedido.