El 29 de julio de 2011 un turista correntino que se encontraba de paseo por San Lorenzo hallóa dos jóvenes muertas en un cerro ubicado a unos 12 kilómetros del centro capitalino. El registro indicaba que ambas jóvenes habían ingresado a la reserva dos semanas antes: un 15 de julio alrededor de las 18 hs.
A partir del hallazgo fueron develándose datos que harían de este crimen, uno de los más mediáticos y lamentables que ocurrieron en Salta. Se supo en primera instancia que las jóvenes eran Cassandre Bouvier, de 29 años y Houria Moumni de 24, quedando inmortalizado el caso como el de “las turistas francesas”.
A Cassandre la encontraron primero, después a Houria. No había más que dos cuerpos en un sitio alejado, sin testigos ni indicios de cómo habían llegado ahí. Sólo material genético sin sospechosos con quienes contrastarlos.
La investigación estuvo atravesada por la conmoción en la provincia, en el país y también en Francia, ya que el padre de una de las chicas, Jean Michel Bouvier se reunió con la entonces presidenta, Cristina Fernández de Kirchner y le pidió ayuda para los avances de la investigación.
La Policía salteña empezó una persecución incansable. Los ánimos ya venían caldeados porque ese mismo año, solo con unos días de diferencia, se había denunciado la desaparición de María Cash.
El primer avance consistente fue gracias al celular de Houria, que pudo ser detectado cuando un hombre de 34 años, conocido como Gustavo Lasi intentó usarlo. A partir de esta alerta, llegaron a él. Según se comprobó las había matado con una carabina de su padre, les había robado la cámara de fotos para regalársela a su novia y encontraron su material genético en el cuerpo de las chicas.
Según consta en el expediente Lasi señaló como cómplices a Santos Clemente Vera (41) y Daniel Vilte Laxi (34).
En 2014 se realizó el juicio contra los tres imputados. Gustavo Lasi fue condenado a 30 años. Vera y Vilte Laxi fueron absueltos y fue esa la decisión que separó a las familias: Jean Michel Bouvier les manifestó su apoyo y acusó a los investigadores de culpar a un inocente. Pidió, muchas veces, que recibieran un resarcimiento por el tiempo que habían estado detenidos.
La fiscalía y el resto de los familiares de las víctimas, incluso la mamá y la hermana de Cassandre, apelaron ante el Tribunal de Impugnación, igual que el fiscal penal de Salta. El 3 de febrero de 2016 Santos Vera supo que volvería a la cárcel: desde entonces está preso en el penal de Villa Las Rosas.
La Sala III del Tribunal de Impugnación, así como relata Clarín, dispuso condenar a Gustavo Lasi a la pena de prisión perpetua como “coautor material y penalmente responsable de los delitos de robo calificado por el uso de arma de fuego, abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas y el uso de armas (dos hechos) y homicidio ‘criminis causae’ (dos hechos), todo en concurso real”. Es decir, agravó su condena.
Sostuvieron la absolución de Daniel Octavio Eduardo Vilte Laxi “por aplicación del beneficio de la duda” y condenaron a Santos Clemente Vera a perpetua por los mismos delitos que Lasi.
UN PADRE QUE BUSCA RESPUESTAS
Ahora, a 11 años de los crímenes, Jean-Michel Bouvier ya jubilado y gravemente enfermo, envió una carta desde París al presidente Alberto Fernández.
En la misma, le reclama al mandatario argentino la reapertura de la investigación que revele cómo, cuándo, dónde y por quiénes fueron atacadas, golpeadas, abusadas y ejecutadas por la espalda Cassandre y Houria y pedir, una vez más, por la liberación de Clemente Vera, uno de los acusados por los asesinatos, que lleva ya más de 8 años preso y espera hace cuatro que la Corte Suprema de Justicia de la Nación resuelva su situación.
“La muerte de Cassandre y Houria es una injusticia que todavía espera ser reparada. Su memoria exige esta reparación. La Argentina que amaban está en deuda con ellas”, escribió Bouvier en la carta.