En un sorprendente incidente ocurrido el pasado 14 de septiembre en el Penal de Villa Las Rosas, una mujer de 51 años fue detenida en pleno intento de ingresar drogas al recinto penitenciario. La mujer tenía la intención de visitar a un recluso, pero su audaz plan fue descubierto durante una minuciosa requisa.
La astuta infractora ocultó la sustancia ilícita en el interior de una campera de doble tela. Dentro de esta prenda se encontró una misteriosa bolsa rectangular de polietileno transparente que albergaba una sustancia blanquecina en forma pulverulenta. Los resultados del Narcotest dejaron claro que se trataba de cocaína y sus derivados, con un peso total de 8,5 gramos. La situación tomó un giro aún más impactante cuando se reveló que la mujer estaba acusada de entregar estupefacientes de forma gratuita, con la agravante de que esto se estaba llevando a cabo dentro de las mismas paredes del establecimiento penitenciario.
El fiscal Penal de la Unidad Fiscal contra la Narcocriminalidad (UFINAR), Santiago López Soto, actuó con celeridad y procedió a imputar provisionalmente a la mujer por su presunta implicación en este elaborado plan. Ahora, las autoridades se encuentran investigando si tenía cómplices dentro o fuera del penal. Esta inusual historia demuestra una vez más que la seguridad en las cárceles es fundamental para evitar la entrada de sustancias prohibidas, y que algunos infractores están dispuestos a tomar riesgos inimaginables para lograr sus objetivos.
