Aunque Donald Trump anunció una pausa de 90 días en los aranceles para 75 países, Argentina no fue incluida. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, confirmó que se mantendrá el gravamen del 10% para las importaciones desde nuestro país.
La medida forma parte de la estrategia comercial del gobierno estadounidense, que busca presionar a sus socios a renegociar acuerdos. “No respondan con represalias y serán recompensados”, dijo Bessent, alineándose con la postura firme del presidente Trump frente a China y otros países con déficit comercial.
Pese a las tensiones, los mercados reaccionaron positivamente: Wall Street subió hasta un 12%, y los bonos argentinos también mostraron mejoras.