Oscar Esperanza Palavecino nació el 18 de diciembre de 1959 en la localidad de “Rancho El Ñato”, en el departamento Rivadavia, en la región chaqueña de la provincia de Salta.
Desde niño trabajó para colaborar en casa. A los 9 años, su madre, Estela, enfermó, y tres años después, la familia tuvo que vender sus pocas pertenencias e instalarse en Tartagal con ella y sus hermanos Pascual, Juan Pablo y Lucho. Por la mañana asistía a clases y por la tarde trabajaba. Realizó múltiples trabajos durante esos años, llegando a trabajar hasta las 2 de la mañana junto a su hermano, lustraba zapatos en la plaza, los domingos vendía empanadas casa por casa, repartía agua potable en los barrios donde no había y fue cadete en un mercado. A los 15 años, a pesar del esfuerzo de él y sus hermanos, su madre falleció.
Aprendió a tocar la guitarra e integró el Trío Pilcomayo y el conjunto Los del Pilcomayo. De su oficio de camionero pasó a ser chofer de ómnibus. Desde los 23 años y durante 14 años, trabajó en las empresas Atahualpa y La Veloz del Norte, donde en los viajes largos siempre cantaba: “creo que ahí nació el solista; me acostumbré a escucharme”.
De a poco comenzaron sus primeros pasos como cantante. Empezó a presentarse en la peña folklórica “Gauchos de Güemes” y en la parrillada de “Don Johnny”, atravesando así su miedo al público.
Grabó su primer casete con la participación de Mauro Matos, violinista de la Ciudad de Buenos Aires. Debido al costo que representaba la sesión de grabación, Oscar debió solicitar ayuda a personas cercanas para costear la producción. Lamentablemente, nadie pudo “darle una mano”, dejando la grabación incompleta. Uno de sus temas destacados de esa época fue “Gatito pa’ don Lucas”.
Hoy en día, la sola presencia del chaqueño puede convocar multitudes. Ha llenado estadios, teatros, y eventos que cualquier cantante desearía. Oscar tiene el lujo de pedir horarios especiales y cantar dos horas seguidas si es necesario.
Recientemente, la revista Forbes publicó un ranking de los músicos argentinos que más fortuna acumularon, y el Chaqueño Palavecino figura allí. Según Forbes, el artista salteño ha acumulado una fortuna de 7 millones de dólares.
“Me considero un elegido, pues aunque no he tenido la posibilidad de estudiar, ya que perdí a mi madre a los 15 años, he llegado a esto trabajando duramente. Honestamente, la calle ha sido mi escuela, y esto que vivo me alegra porque siempre he querido estar en contacto con la gente, que vean estas ganas de cantar”, dice Oscar “El Chaqueño” Palavecino.