Una historia que generó revuelo en Salta sumó en las últimas horas un nuevo capítulo. La semana pasada, la policía irrumpió en el barrio Ceferino luego de que dos padres denunciaran que su hijo, de apenas un año y medio, llevaba dos meses desaparecido. Finalmente, el pequeño fue hallado en la capital salteña y trasladado a Mosconi.
Según la información oficial, el niño habría estado retenido por su madrina, y la causa continúa en investigación. Sin embargo, la mujer rompió el silencio y habló Con Con Criterio Salta para dar su versión de los hechos.
“Jamás lo retuve. Me lo entregaron en febrero porque necesitaban ayuda. Yo lo traje a Salta con autorización firmada por el juez de paz”, aseguró la mujer, que también es tía del menor.
La situación se tornó tensa cuando los padres del niño llegaron en estado de ebriedad, acompañados por una mujer boliviana, y exigieron que se les entregara al niño. “Estaban alterados. Yo no accedí y pedí que todo se hiciera en la comisaría. Allí se pusieron violentos y terminamos todos detenidos por unas horas”, relató.
Días después, la madrina recibió una orden judicial para entregar al niño a sus padres. Un vehículo de la Brigada de Investigaciones la acompañó hasta Mosconi, donde finalmente se concretó la entrega.
Pero la historia no termina ahí. La mujer expresó su temor por la presencia de la mujer boliviana, a quien no conoce y de quien sospecha. “Dijo ser familia paterna, pero yo no la conozco. Tengo miedo de que estén pensando en llevarse al niño a Bolivia para venderlo”, advirtió.
Además, sostuvo que durante el tiempo que cuidó del niño, se ocupó de su higiene y salud. “Tenía la cabeza un poco deformada por las caídas que tuvo con ellos, y ya estábamos haciéndole ver por médicos”, contó.
Por último, reveló que recibió una nueva notificación judicial en la que le informan que el niño no debe salir de su casa. Confundida y preocupada, la mujer expresó: “No entiendo qué debo hacer ahora, pero lo único que quiero es recuperar a mi sobrino, porque creo que está en peligro”.
